lunes, 22 de junio de 2015

3.- Linterna CEGASA 2.0

VIENE DE CICLOLITO 24/2/14

Os presento este miniproyecto de hora y media, más fácil no puede ser.
Cómo convertir una linterna de esas de pila de petaca gorda del año de la polca en algo más práctico, porque da más luz, más eficiente desde el punto de vista energético y desde luego más ligero... ah! y también es una forma de sacar partido a un móvil viejo!

Una amiga mía, Lili, tiene que atravesar un jardín trasero (donde va a poner un gallinero que le estamos ayudando a construir, lo pondré en el siguiente post!) sin luz para entrar en su casa y llevaba una linterna Cegasa de antes de la guerra que alumbraba menos que un mechero y pesaba unos 12.3kg, así que le recomendé hacerse con una de LEDs pero Lili es consecuente con su forma de pensar: "si funciona no la voy a tirar, recuerda las 3 ERRES: Reducir, Reutilizar y Reciclar" así que se me ocurrió la idea.

Rebuscando en los armarios de mis padres encontré unos cuantos móviles viejos que no se usarán más y rescaté unas baterías.
Estas baterías son de Li-Ion o ión-litio de 3.7v y 750mAh.
La ventaja que tienen las baterías de litio respecto de las de Ni-Cd (níquel-cadmio) es que son mucho más eficientes, por lo tanto más pequeñas y más ligeras, pueden descargarse muy rápido o con descarga lineal (no se van apagando poco a poco, dan todo normal hasta que no pueden y se apagan) y no tienen efecto memoria, es decir, según las vas usando y recargando siguen funcionando siempre igual hasta que ya no pueden más y funden. La ventaja derivada de esto es que puedes recargarlas aunque estén a medio uso y no les pasa nada.
Los inconvenientes, pues evidentemente son más caras y bueno, a veces explotan... jejeje Pero en concreto las baterias de los móviles ya vienen con su carcasilla protectora para que esto no pase.

En la foto también se puede ver el módulo de carga para este tipo de baterías. Lo compré en ebay por menos de 2 euros. Básicamente se encarga de gestionar la carga de las baterías y cortar cuando están llenas. Tiene dos diodos LED, uno que marca carga y otro que parpadea cuando ha terminado.



Aquí está el circuito de prueba, un LED de 3W que me dió mi amigo Pepo que los compra en paquetes de 50 para hacer sus inventos para el coche, la batería de un móvil, un pequeño interruptor y unos cables.


Visto que funcionaba, cargaba y todo, me puse a modificar la linterna.
Unos agujeritos con la Dremel y un poquito de lima (también se puede hacer con un cutter), sacar la bombilla de wolframio y la pila Duracel.


Para proteger un poco la ventana para ver los LEDs de carga me frabriqué un pequeño cristalito a partir de una caja de CD.


Para reutilizar el boton original de la linterna sólo hay que conectar uno de los cables de la batería directo al LED y el otro partirlo en dos cada trozo a una pala.
Pegué el cristalito con pegamento termofusible y en un principio sujeté el LED de la misma manera.



Metí la placa de carga con el mismo pegamento y un poco de espuma de embalaje para rellenar y que la batería no se moviera.


Después de terminarla e incluso entregársela a mi amiga, le estuve dando vueltas, eché un vistazo a la hoja del LED y ví que alcanza temperaturas bastante altas, en concreto supera los 80º en uso continuado, que casualmente es la temperatura del pegamento termofusible, así que está claro que no era una opción...
En un ratito con unos recortes de latón le fabriqué un pequeño "disipador" que también hace las veces de soporte.


Y aquí está la linterna terminada y cargando con su mini USB a un ordenador!


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